«Romper el statu quo requiere alinear el propósito personal con el de la organización»

Lucía Cabanas
Gerenta de Marketing, Comunicación y Sustentabilidad de Itaú Uruguay
¿Hasta qué punto el liderazgo de alto nivel debe involucrarse en causas sociales o políticas?
Las personas que lideran son claves en las organizaciones y estas son fundamentales para impulsar los cambios que nuestras sociedades necesitan. Estamos llamados a involucrarnos en los problemas de la sociedad.
Nos enfrentamos cada vez a mayores retos económicos, sociales y ambientales y se precisan líderes empresariales con propósito que busquen otra forma de hacer las cosas. Líderes que piensen nuevas soluciones para nuevos problemas, que se involucren en las causas que son relevantes para los distintos públicos de interés, que quieran ser parte de la solución. Hasta qué punto involucrarse lo definirá cada líder evaluando la creación de valor que genera a partir de su participación.
¿El activismo de la persona de vértice debe estar alineado con los valores de la empresa o puede reflejar creencias personales?
Las organizaciones estamos redefiniendo la manera en que hacemos las cosas y es a través de los líderes que se consigue ese ambicioso objetivo. El mundo cambió y también cambió la manera en que se hace empresa hoy.
«El mundo cambió y también cambió la manera en que se hace empresa hoy”.
Si consideramos el activismo como asumir un papel como agente de cambio, la persona de vértice es clave para transformar el paradigma empresarial. Y romper el statu quo requiere alinear el propósito personal con el de la organización y actuar con convicción, coherencia y constancia. Si los valores de la empresa no están alineados con las creencias personales es imposible llevar adelante este gran desafío.
¿Cuáles son los principales desafíos para el equipo de comunicación cuando un CEO adopta una postura pública en temas sociales y políticos?
El equipo de comunicación y el CEO son grandes socios en una organización, siendo la comunicación una herramienta fundamental para alcanzar los objetivos de la empresa. Es clave la coherencia y el alineamiento de los mensajes del alto liderazgo, para construir un único discurso, claro y efectivo.
El liderazgo es influencia, y que el CEO adopte una postura referente a temas sociales puede generar que las personas que trabajen en esa organización se sientan más conectados con la empresa, que los clientes también, y así con los distintos públicos, ya que el nuevo liderazgo que se quiere es aquel que pone a las personas en el centro. El mayor desafío puede ser que la postura pública asumida sea diferente a la esperada por los diferentes stakeholders, provocando un impacto negativo en la reputación del CEO y de la organización.
De igual forma, vale gestionar el riesgo considerando las sensibilidades y opiniones diferentes, recordando lo que enriquece el aporte de las personas que lideran las empresas en la discusión económica, política y social.
¿Qué impacto puede tener el activismo de un CEO en la reputación de la empresa ante clientes, accionistas y empleados?
En estos tiempos en los que se busca un equilibrio entre crecimiento económico, uso de recursos finitos y bienestar de la comunidad, los CEO y los altos liderazgos están invitados a asumir un rol que va más allá de la dimensión del negocio para tener una postura activa que representa los valores de la empresa. Ya no son considerados como voceros de su organización solamente, sino que se espera de ellos un rol activo en las discusiones más importantes del país.
«Se espera de los CEO un rol activo en las discusiones más importantes del país».
El desafío está que en que ese posicionamiento público en temas políticos y sociales, impacta en su reputación individual, así como en la reputación de la empresa, por lo que es clave una postura ética, responsable, con transparencia y positiva. En esta participación activa y pública, el CEO debe transmitir coherencia entre cómo es él o ella, lo que dice, las acciones que emprende, sin olvidar los valores de la organización a la que representa. Debe tener siempre presente que la reputación del CEO es uno de los activos más importantes y competitivos de la organización.
¿Cómo pueden los CEO activistas contribuir a una economía más inclusiva y sostenible?
Todos y todas podemos contribuir al bien común para generar el cambio sistémico que las personas y el planeta precisan. En este sentido, los roles de liderazgo toman un principal papel en la búsqueda por una sociedad más justa e inclusiva.
Las iniciativas que generan redes de colaboración son un camino valioso, ya que crean espacios en los que se reflexiona, analiza, intercambia y se lleva a la acción entre los CEO y altos líderes de distintas industrias que buscan un lugar compartido para abordar temáticas sociales y ambientales que son complejas.
Algunos ejemplos en Uruguay son el Consejo Empresarial B, DERES y Pacto Global, entre otros. Otro camino para contribuir a una sociedad más inclusiva y sostenible es transformar retos en oportunidades, integrando una mirada de triple impacto desde el corazón del negocio, midiendo, gestionando y poniéndose objetivos de impacto positivo.