Revista del IEEM
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El mundo del trabajo en tiempos de COVID-19

La crisis actual afecta a todos los sectores, sin excepciones. ¿Cuáles son las claves para reaccionar de manera rápida y competente?

En Uruguay, los efectos sociales y económicos de la emergencia por el COVID-19 están imponiendo a las empresas un cambio de ritmo necesario para enfrentar una de las “crisis del sistema” más violentas desde la crisis de 2001.

Según el observatorio de ManpowerGroup, no hay sectores inmunes al COVID-19: las empresas tuvieron que revisar los procesos organizacionales tradicionales en unas pocas horas para gestionar las consecuencias en las operaciones y, en consecuencia, en toda la cadena de valor.

A pocos días de la propagación de la pandemia, ya se hacen evidentes una serie de aprendizajes clave.

 

Líderes para el futuro

La emergencia del COVID-19 destacó la forma en que el liderazgo responsable y preparado es importante para reaccionar de manera rápida y competente en tiempos de crisis.

Los líderes empresariales tienen la tarea de gestionar equipos de trabajo más autónomos, pero con procesos, responsabilidades y roles definidos, sobre los cuales medir resultados y readaptar el comportamiento.

Se presenta la oportunidad para que las empresas se conviertan en líderes de la transformación de la industria en la que operan.

Se presenta la oportunidad para que las empresas se conviertan en líderes de la transformación de la industria en la que operan, rediseñando modelos de negocio y diversificando canales para la entrega de sus servicios.

Aprendizaje clave: un buen plan de contingencia es solo el punto de partida para crear las bases necesarias para aprovechar las oportunidades de repensar la compañía. Sin embargo, un liderazgo consciente, responsable y presente es absolutamente imprescindible para hacer frente a un contexto de gran transformación impuesto por la crisis. Es necesario continuar desarrollando estrategias de capital humano para apoyar el crecimiento de líderes capaces.

 

Nuevas formas de trabajo

Esta emergencia ha demostrado la validez del teletrabajo, una herramienta en la cual la tecnología seguirá desempeñando un papel crucial, no solo permitiendo la conectividad a los empleados fuera de las oficinas, sino también favoreciendo una nueva organización del trabajo y garantizando la seguridad de datos y privacidad.

El teletrabajo ya era una parte integral de muchas organizaciones, pero muchas empresas se encontraron sin preparación para el trabajo remoto y su aplicación en una situación de crisis.

La situación puso a prueba a un gran número de empresas, que carecían de proyectos de trabajo remoto estructurados y no contaban con las tecnologías necesarias. El desafío se hizo más evidente en empresas de mediano y pequeño porte, pero también afectó a empresas del sector público y a compañías multinacionales.

La emergencia dejará un legado sobre el cual construir una forma de trabajar más cerca de las necesidades de las personas.

Aprendizaje clave: la emergencia dejará un legado sobre el cual construir una forma de trabajar más cerca de las necesidades de las personas, capaz de superar las barreras físicas, atenta al equilibrio entre la vida laboral y personal.

 

Agilidad, capacitación y reskilling

Estamos en medio de la revolución de las habilidades: las personas deben comprender la necesidad de actualizarse continuamente para seguir siendo competitivos y aportar valor a la empresa para la que trabajan. Se necesitan programas de actualización con ciclos de entrenamiento más rápidos, cortos y efectivos.

Con la combinación correcta de habilidades, las personas que aumentan sus competencias tecnológicas incrementan su empleabilidad y su contribución a los procesos de producción.

A su vez, los líderes tendrán que incluir en su agenda conversaciones de carrera que tengan la misión de ayudar a las personas a mejorar sus habilidades.

Encontrarse listo significa contar con un plan de capacitación adecuado para hacer frente a escenarios complejos y de alta volatilidad.

Aprendizaje clave: las transformaciones pueden ser repentinas e inesperadas. Encontrarse listo significa contar con un plan de capacitación adecuado para hacer frente a escenarios complejos y de alta volatilidad.

 

Innovación para crecer

Las reuniones en las salas de juntas dejan espacio para llamadas de conferencia y videollamadas gracias a las herramientas digitales y la infraestructura de red fija o móvil.

La capacitación pasa a lo digital: los seminarios web y los tutoriales online «resuelven» el tema presencial. Los cuestionarios y las pruebas permiten verificar el aprendizaje y mantener alta la curva de compromiso.

La selección de talentos y nuevos recursos descubre nuevas formas de realizar entrevistas de aptitud gracias a las plataformas dedicadas.

Aprendizaje clave: actualizar el parque tecnológico y la preferencia por una infraestructura que prefiera «móvil» puede facilitar formas alternativas de trabajar en la oficina de una manera ágil y eficiente.

 

Asegura tu empresa y tu gente: procesos y comunicación

Como corolario de estas lecciones aprendidas, subrayamos la importancia de contar con un modelo para la planificación de la continuidad del negocio en caso de una pandemia. En situaciones de emergencia, la planificación de la continuidad del negocio debe describirse en un «plan de contingencia», un proceso global que identifica los peligros potenciales que amenazan a la organización, proporcionando soluciones operativas. En tiempos de crisis, ninguna herramienta es más efectiva que un buen plan de comunicación. Las soluciones han de ser sistemáticas, periódicas y deben surgir desde los líderes de la organización.

 

El día después

Estamos ante una crisis de una magnitud muy profunda a escala mundial, que a nadie ha dejado indiferente y que dejará una huella indeleble en la memoria colectiva de la humanidad. Sin duda, el mundo será completamente diferente después de la pandemia. Los días vividos han afectado nuestras vidas, cambiado nuestros hábitos y costumbres, desde la manera en que nos saludamos hasta el modo en que trabajamos. Las oficinas se vaciaron para cumplir con la necesaria recomendación del distanciamiento social y la vida familiar se vio trastocada por estos cambios. Con seguridad, muchas cosas van a cambiar y emergerán con fuerza nuevos modelos de trabajo, que harán necesarios reformar el sistema laboral, el de la salud y otros tantos.

Con seguridad, muchas cosas van a cambiar y emergerán con fuerza nuevos modelos de trabajo, que harán necesarios reformar el sistema laboral, el de la salud y otros tantos.

La crisis ya nos ha dejado muchas lecciones y aprendizajes. Pero quizá la más importante sea la de entender que la única forma de combatir esta situación es estando unidos y apostando al compromiso, la cooperación y a la solidaridad de las personas. Ha sido clave llevar adelante campañas de concientización, compartir información de otros países y aprender de lo bueno y lo malo, de los aciertos y los errores. Si bien todo esto nos ha separado (cierre de fronteras entre países, aislamiento, distanciamiento social, etc.), también es cierto que nos ha unido para colaborar y sacar lo mejor de todos y cada uno.

Está claro que, cuando termine la emergencia, el país tendrá que reaccionar rápidamente ante la actual crisis económica que también ha dejado en jaque al mercado laboral. En este contexto, la contribución de las empresas de recursos humanos será esencial para acompañar a las compañías en un período de incertidumbre en el sistema económico y de producción. Como pueblo, como nación, tenemos un futuro compartido y está en nuestras manos la inmensa responsabilidad de permanecer unidos, solidarios y hacer esfuerzos coordinados para prevalecer y superar este desafío.

Autor

Gerenta general de ManpowerGroup Uruguay

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