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Hacer Empresa

Un aliado para la innovación

Cómo aplicar Design Thinking exitosamente.

Empezar por el principio. Involucrar a los pensadores del diseño desde el comienzo del proceso de innovación, antes de que se haya fijado una dirección. El pensamiento de diseño te ayudará a explorar más ideas más rápidamente de lo que podrías de otra manera.

Adoptá un enfoque centrado en la persona. Junto con las consideraciones de negocios y la tecnología, la innovación debe tener en cuenta el comportamiento humano, las necesidades y preferencias. Design Thinking centrado en la persona —especialmente cuando incluye investigación con base en la observación directa— capturará datos inesperados y producirá innovación que reflejará con mayor precisión lo que los consumidores quieren.

Intentá con tiempo y con frecuencia. Creá una expectativa de experimentación rápida y prototipos. Animá a los equipos a crear un prototipo en la primera semana de un proyecto. Medí el progreso con una métrica como el tiempo promedio hasta el primer prototipo o el número de consumidores expuestos a los prototipos durante la vida de un programa.

Buscá ayuda externa. Expandí el ecosistema de innovación buscando oportunidades para cocrear con clientes y consumidores. Explotá la web 2.0 para ampliar la eficiencia de tu equipo de innovación.

Combiná proyectos grandes y pequeños. Gestioná una cartera de innovación que se extienda desde ideas incrementales a corto plazo hasta ideas revolucionarias a largo plazo. Esperá a que las unidades de negocio se impulsen y financiá innovación incremental, pero está dispuesto a iniciar una innovación revolucionaria desde arriba.

Presupuesto al ritmo de la innovación. El pensamiento de diseño ocurre rápidamente, pero la ruta al mercado puede ser impredecible. No limites el ritmo de la innovación con base en los ciclos presupuestarios. Preparate para repensar tu enfoque de financiamiento a medida que avanzan los proyectos y los equipos aprenden más sobre las oportunidades.

Encontrá talento de todas las formas que puedas. Buscá contratar de programas interdisciplinarios como el nuevo Instituto de Diseño de Stanford y de escuelas negocios progresivas como Rotman, en Toronto. Personas con antecedentes de diseño más convencional pueden impulsar soluciones mucho más allá de tus expectativas. Podés también capacitar a no diseñadores con los atributos adecuados para sobresalir en roles de Design Thinking.

Diseño para el ciclo. En muchas empresas, la gente se traslada cada 12 a 18 meses. Pero los proyectos de diseño pueden tardar más que eso en llegar desde el día uno a través de la implementación. Planificá las asignaciones para que los pensadores del diseño puedan estar desde la inspiración y la ideación hasta la implementación. Experimentar el ciclo completo genera un mejor juicio y grandes beneficios a largo plazo para la organización.

Fuente: “Design Thinking” publicado en HBR’s 10 Must Reads On Design Thinking, Harvard Business Review Press, abril de 2020.

 

 

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