Revista del IEEM
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Más internacionalización

El IEEM está profundamente comprometido con su política de internacionalización, que avanza año tras año y no deja región fuera de su radar. En este marco, comparto en esta columna algunas experiencias recientes que me resultaron muy enriquecedores.

A principios de año tuve el honor de ser invitado a participar en Nueva Delhi del Raisina Dialogue, un gran evento internacional de discusión de temas globales organizado por la Fundación Observer Research y el Ministerio de Relaciones Exteriores de la India.

El tema elegido para la cena inaugural fue automatización y mercado de trabajo. Tenía mucha expectativa de escuchar la visión de Jayant Sinha (ministro de Aviación Civil de India), de Gabriela Ramos (jefe de Gabinete de la OCDE y representante ante el G20) y de empresarios líderes como Yao Zhang (fundador y CEO de Roboterra). Sin embargo, no escuché nada demasiado nuevo. Que hay que proteger al trabajo de las personas y no las posiciones laborales. Que los sistemas educativos actuales no están preparando a las personas con las habilidades básicas para lidiar con el avance de la tecnología. Que la adaptación es un proceso en el que la curiosidad y la creatividad juegan un rol fundamental. En definitiva, lo que me quedó claro es que la automatización del trabajo es un enorme desafío aún sin respuestas efectivas a nivel global. También me quedó claro que, en este frente, con la agenda desarrollada en los últimos años, el IEEM está muy cerca de la frontera.

El desafío de enfrentar el terrorismo estuvo presente en el evento. Ahí destaco a Vyacheslav Nikonov (miembro de la Duma Rusa) quien presentó con gran claridad su posición con 7 pautas básicas: i) solo los Estados funcionales pueden combatir el terrorismo; ii) no hay terrorismo bueno basado en la libertad de los pueblos; iii) una genuina cooperación internacional es necesaria, que va mucho más allá de coordinación e incluye el intercambio de información de inteligencia; iv) se debe identificar de dónde sale el financiamiento del terrorismo; v) las organizaciones regionales juegan un rol fundamental; vi) el terrorismo debe ser eliminado en el origen y no dejarlo avanzar a otros territorios; y vii) es clave lidiar con las fuentes originales del terrorismo: ideología y condiciones de vida de la población. Por lo menos a mí, que no sé nada del tema, me sirvió para ordenar el asunto.

Transmisión de datos y ciberseguridad fue otro tema sobre el que se discutió en Nueva Delhi. Ahí, Iddo Moed (coordinador de Ciberseguridad del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel) insistió en que la clave es velar por mantener la confianza en la trasmisión de información. También me pareció muy interesante la reflexión de Kaja Ciglic (directora de Ciberseguridad de Microsoft) de que el problema es que el sector público y sector privado no se ponen de acuerdo en cómo y a qué velocidad avanzar porque hoy hablan distintos idiomas. Este es un tema que cada día se vuelve más relevante. La innovación basada en datos como motor de desarrollo económico depende en buena medida de avanzar en este asunto. Este asunto está claramente en el radar del IEEM y estamos avanzando.

El problema es que el sector público y sector privado no se ponen de acuerdo en cómo y a qué velocidad avanzar porque hoy hablan distintos idiomas.

También en el marco de la estrategia de internacionalización del IEEM, recientemente tuve la oportunidad de viajar a Dubái para participar del Foro Global de Negocios Emiratos-América Latina, organizado por la Cámara de Comercio de Dubái.

Empiezo con unas palabras sobre el modelo desarrollo del país, porque vale la pena. Los Emiratos Árabes Unidos son una monarquía constitucional, federal y electiva, con 9 millones de habitantes —de los cuales el 70 % son extranjeros— y un ingreso per cápita cinco veces superior al nuestro. Es cierto que son el séptimo productor mundial de petróleo y gas natural. Sin embargo, en los últimos 30 años han logrado diversificar y sofisticar su economía: mientras el petróleo y gas natural explicaban el 75 % del PBI en los 80, hoy representan tan solo el 25 %. Sectores como el desarrollo en infraestructura, el transporte, los servicios financieros, el comercio y el turismo son los motores de la economía.

Más allá de las diferencias culturales, Emiratos es un oasis en el medio del desierto de Arabia, ávido por progresar y con muchos recursos para invertir.

Más allá de las diferencias culturales, Emiratos es un oasis en el medio del desierto de Arabia, ávido por progresar y con muchos recursos para invertir. Uruguay exporta solo USD 9 millones al año a Emiratos (0,1 % del total de nuestras exportaciones). Lácteos y carnes son los principales productos, seguido de cerca por los cítricos y caballos vivos, algo de arroz y medicamentos. Los aranceles que hay que pagar son bajos, oscilan entre 0 y 5 %. La única barrera no arancelaria relevante es la certificación halal, rito tradicional árabe que se aplica a alimentos derivados de animales e incluso cosméticos y farmacéuticos. Uruguay está por terminar la puesta a punto para quedar habilitado, luego de nuevos requisitos exigidos.

El potencial para hacer negocios es enorme. No hay que mirar solo a Emiratos como mercado, el puerto de Jabel Ali es la puerta a la Unión Aduanera que comprende toda la Península Arábiga (80 millones de habitantes, destino hoy de tan solo el 0,4% del total de nuestras exportaciones). Y sí, hay que competir con Australia, Nueva Zelanda, EE. UU., Brasil, Argentina: todos exportando en la magnitud esperable. No pasa lo mismo con nosotros. La distancia a Dubái es casi idéntica desde Montevideo o desde Auckland, pero Nueva Zelanda vende alimentos por un valor 100 veces superior al que exportamos nosotros.

La distancia a Dubái es casi idéntica desde Montevideo o desde Auckland, pero Nueva Zelanda vende alimentos por un valor 100 veces superior al que exportamos nosotros.

Tenemos un gran equipo en la embajada uruguaya en Abu Dabi, que se mueve como pez en el agua. Pero se necesita invertir más. Lamentablemente hace ya un par de años que Uruguay dejó de participar institucionalmente en la Gulfood de Dubái, principal feria de alimentos de la región. Los competidores siempre dicen presente.

Entre octubre de 2020 y abril de 2021 se llevará a cabo en Dubái la próxima Exposición Universal. Aquella misma que se hizo en París conmemorando el centenario de la revolución francesa y que le dejó a la Torre Eiffel de recuerdo. Ya confirmaron su participación más de 170 países y la gran mayoría ya pagó por sus lotes. No podemos quedar afuera. No tengo duda de que una presencia estratégica en la Expo 2020 debería ser el mojón para posicionarnos en el mercado árabe, porque realmente vale la pena.

La academia también tiene un rol que jugar para juntar las puntas, realizar intercambios y entrelazar las relaciones. Y en eso estamos.

La academia también tiene un rol que jugar para juntar las puntas, realizar intercambios y entrelazar las relaciones. Y en eso estamos. El IEEM mantuvo múltiples reuniones con autoridades de universidades y organizaciones empresariales de Emiratos, con inmejorables perspectivas.

La internacionalización no es un camino único, sino que exige avanzar por múltiples frentes. Y en eso estamos.

Autor

Profesor de Economía en

PhD en Economía, Universidad de San Andrés (Argentina); máster en Economía, Universidad de Chicago; Programa de Alta Dirección, IEEM, Universidad de Montevideo; licenciado en Economía y Analista en Contabilidad y Administración, Universidad de la República (Uruguay); GloColl, Harvard Business School.

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