El plan anual de comunicación de la firma puede ya estar en curso, en función de las necesidades planteadas para el negocio, pero existen una serie de tendencias que, a la hora de la ejecución, pocas marcas podrán pasar por alto en este 2022.

Se trata de temas relevantes para la sociedad, novedades de diseño o redacción de las que mejor tomar nota, no solo para dar en el blanco con los objetivos planteados, sino para no pisar en falso.

El mundo digital ha elevado la voz de la población en general y esta es cada vez más exigente respecto a lo que las empresas dicen y hacen, sean o no consumidores de esas marcas. Esto lleva a que sea necesario cada vez más, por un lado, incluir en la agenda del negocio asuntos sociales relevantes, sacando el foco de lo comercial. Por otra parte, la mayor aceptación que las marcas logren de su comunicación dependerá también de su capacidad de diferenciarse e incluso divertir a la audiencia. ¡Menuda combinación!

A continuación, algunas pistas para bucear un poco más cómodos en este mar de consumidores jueces y espectadores.

1) Prestarle atención a la diversidad ya no es negociable

Ya sea para pensar en los integrantes que participarán del panel en un seminario, para la realización de una pieza de reclutamiento en redes sociales, para el diseño de un formulario de consulta o la selección de las imágenes que serán el foco de una pieza publicitaria. Cualquiera sea el objetivo de la comunicación que se vaya a realizar, así como su soporte, hoy en día pensar con un criterio de diversidad e inclusión se ha vuelto prioritario.

Ser específico y cuidadoso en el uso de imágenes y el vocabulario no solamente es bien visto por el público, sino que cualquier error en este sentido podría ocasionar duras críticas que poco tendrán que ver con el propósito y el mensaje de la comunicación.

2. El compromiso ético debe existir, y comunicarse

El compromiso real que las empresas tengan con el medio ambiente y el manejo ético en los diversos aspectos del negocio es una tendencia que va mucho más allá del área de Comunicación, pero es cierto que desde el punto de vista comunicacional se podrá sacar provecho de los proyectos vinculados a la responsabilidad que la empresa demuestra frente estos asuntos.

Si la organización logra un propósito alineado con temas sociales que sea relevante y consistente con su negocio, empapar a toda la comunicación con estos mensajes resultará natural y efectivo.

3. ¿Quién quiere ser uno más?

Probablemente más fácil de implementar en campañas de e-mail marketing o redes sociales, la hiperpersonalización seguirá siendo una tendencia de la que muchas marcas deberán valerse durante este año, ya sea ofreciendo contenidos personalizados o incluso la oferta de productos a medida.

En este sentido, será fundamental el uso de la información que los consumidores ya han dejado en los diferentes puntos de contacto con la empresa como, por ejemplo, cuando introducen su fecha de nacimiento, optan por diferentes preferencias de consumo o explícitamente le comunicaron a la compañía una necesidad que tendrán en el futuro.

4) Entretener siempre

Sea del rubro que sea, la marca debe llamar la atención del público y los equipos de Marketing y Comunicación deberán buscarle la vuelta para que cada pieza que se lance logre entretener a los destinatarios, expuestos a un sinfín de distracciones. ¿Cómo conseguirlo? Por ejemplo, con un buen diseño, priorizando siempre las imágenes frente a los textos.

Es un buen recurso también la interacción con los usuarios, por lo que el call to action no puede faltar, ya sea a través de un juego o de una consulta, por ejemplo.

5) Historias que acercan, pero no venden

Desde hace ya varios años el storytelling es un gran aliado en la comunicación de las marcas, y el 2022 no será una excepción en este sentido. Es que diferenciarse en marketing y publicidad seguirá siendo uno de los desafíos más grandes en la sociedad actual, por lo cual será clave la búsqueda de historias que conecten con la audiencia, conseguir que el público tenga deseos de acercarse a lo que la marca tiene para compartir porque le resulta interesante y de valor. Llegar a esto implica tomar la decisión explícita de alejarse del lenguaje comercial en la mayor medida posible.