Para construir una vida de excelencia, comienza haciéndote estas preguntas:

“¿Cuáles son mis puntos fuertes?”

Para identificar con precisión tus fortalezas, utiliza el análisis de feedback. Cada vez que tomas una decisión clave, anota el resultado que esperas. Varios meses después, compara los resultados reales con tus resultados esperados. Busca patrones en lo que estás viendo: ¿En qué resultados eres hábil? ¿Qué habilidades tienes que mejorar para conseguir los resultados que quieres? ¿Qué hábitos poco productivos te impiden alcanzar los resultados que deseas? En la identificación de oportunidades para mejorar, no pierdas el tiempo cultivando habilidades en las que tienes poca competencia. En cambio, concéntrate en —y construir sobre— tus fortalezas.

“¿Cómo trabajo?”

¿De qué manera trabajas mejor? ¿Procesas la información de manera más efectiva leyéndola o escuchando a otros hablar? ¿Logras tu máximo trabajando con otras personas o trabajando solo? ¿Te desempeñas mejor mientras tomas de decisiones o al asesorar a otros sobre asuntos clave? ¿Te sientes en plena forma en entornos estresantes o funcionas mejor en ambientes altamente predecibles?

“¿Cuáles son mis valores?”

¿Cuál es tu ética? ¿Cuáles son tus responsabilidades más importantes para vivir una vida digna y ética? ¿Los valores de tu organización resuenan con tus propios valores? Si no es así, tu carrera probablemente estará marcada por la frustración y un bajo rendimiento.

“¿Dónde pertenezco?»

Considera tus fortalezas, estilo de trabajo preferido y valores. De acuerdo con estas cualidades, ¿en qué tipo de ambiente de trabajo encajarías mejor? Encuentra el ajuste perfecto y te transformarás de un empleado meramente aceptable a un actor estrella.

“¿Qué puedo aportar?”

En épocas anteriores, las empresas les decían a los empresarios cuál debía ser su aporte. Hoy tienes opciones. Para decidir cómo puedes mejorar el desempeño de tu organización, primero pregunta qué es lo que requiere la situación. De acuerdo con tus fortalezas, estilo de trabajo y valores, ¿cómo podrías contribuir de la mejor manera a los esfuerzos de tu organización?

Fuente: “Managing Oneself”, Peter F. Drucker, HBR’s Must Reads On Managing Yourself, 2011.