Revista del IEEM
TOP

Marina Rosemberg

PP_Rosemberg

¿Qué hace de Uruguay un destino atractivo para la inversión extranjera directa?

Las principales ventajas de Uruguay para atraer inversión extranjera directa son su sólido marco institucional y el bajo nivel de riesgo político, sobre todo en comparación a otros países de la región. Estos factores permiten que el ambiente de negocios sea favorable y apoyan la estabilidad del marco jurídico que, a su vez, ayudan a que los inversionistas tengan reglas claras respecto a las perspectivas de operar en el país.

 

¿Cuáles soluciones fueron las más requeridas por sus clientes en 2021?

Sobre todo, productos privados de Moody’s Investors Service como el Rating Assessment Service y el Indicative Rating, que permiten que el resultado de la calificación no se comparta con el mercado y así los clientes pueden internalizar la decisión de avanzar o no con su board.  A su vez, el ESG despertó un gran interés. No hubo muchas emisiones de este tipo desde Uruguay, pero el país es un buen candidato por todos sus proyectos renovables, y hay un amplio interés en todo lo que sean bonos sociales, sustentables y KPI.

 

En la edición Panorama 2021 hiciste hincapié en la importancia de la consolidación fiscal para mejorar las métricas crediticias de Uruguay. ¿Ha cambiado la situación en este respecto?

La consolidación fiscal sigue siendo un factor importante. El manejo de la política fiscal en los últimos dos años por parte de las autoridades uruguayas fue bastante prudente y transparente. Aunque hubo un deterioro en las métricas de deuda del gobierno, este fue menor que el observado en la mayoría de los pares de calificación en la categoría Baa. Hasta noviembre del año pasado, los números fiscales muestran que el déficit se redujo en comparación con 2020. Además, Moody’s considera que, mientras los ingresos del gobierno se vayan recuperando en línea con la economía y el gobierno retire los gastos asociados a la respuesta a la pandemia, enmarcados en el fondo coronavirus, el déficit fiscal seguirá reduciéndose y las métricas de deuda se mantendrán estables. Un componente adicional importante para el análisis de Moody’s es el marco institucional establecido por las nuevas reglas fiscales y su cumplimiento. Esto cimentaría la credibilidad de la política fiscal de Uruguay.

 

¿Cuáles son las perspectivas de calificación para Uruguay en 2022?

En agosto de 2021 Moody’s mantuvo la calificación de Baa2 del gobierno de Uruguay y la perspectiva estable. El crecimiento económico en 2021 fue algo más robusto de lo que esperábamos y da una buena base para la actividad en 2022, sobre todo si la inversión se sigue recuperando. Esto, junto con el proceso de consolidación fiscal, apoyará la estabilidad de las métricas de deuda.

Postear un comentario