Ser y tener desde un enfoque de habilidades: ¿Qué demanda el mercado de trabajo?
En 2023, un 86 % de las oportunidades de empleo en posiciones de liderazgo definen al menos una habilidad blanda como parte del perfil de competencias que deben acreditar los candidatos para ser considerados en los procesos de selección. Esta cifra se ubica 25 puntos porcentuales por arriba del promedio global de la demanda de habilidades blandas en el mercado de trabajo uruguayo, que es de 61 %.
La preocupación de los empleadores por las competencias de carácter personal e interpersonal en candidatos a desempeñarse en puestos de liderazgo se explica por la naturaleza de estas posiciones, que involucran liderar equipos de trabajo y navegar situaciones desafiantes en vínculo con otros.
Delineando las competencias
Cuando se habla de habilidades blandas es difícil precisar un límite rígido entre ser y tener, dado que estas se asocian con la identidad (ser) pero no son intrínsecas por naturaleza, sino que se adquieren (tener). No obstante, teniendo claras algunas consideraciones, y a los efectos de aportar a las reflexiones sobre ser y tener en posiciones de liderazgo, podemos delinear una distinción.
Por un lado, podemos asociar el concepto de «ser» a habilidades que se identifican como características personales, que se configuran de forma tanto consciente como inconsciente por experiencias de vida diversas, dentro y fuera del ámbito laboral. Entre ellas, podemos nombrar cualidades como integridad, creatividad, curiosidad, pensamiento lateral, adaptabilidad, atención al detalle, compromiso, responsabilidad y optimismo, entre otras.
Podemos asociar el concepto de «ser» a habilidades que se identifican como características personales, que se configuran de forma tanto consciente como inconsciente por experiencias de vida diversas, dentro y fuera del ámbito laboral.
Por otro lado, podemos asociar el concepto de “tener” a habilidades que están orientadas a obtener resultados, se desarrollan o entrenan intencionalmente y se circunscriben principalmente a labores productivas. Dentro de este grupo podemos incluir competencias como visión estratégica, sentido del negocio, toma de decisiones, eficiencia, manejo de tareas múltiples, gestión del tiempo y capacidad de delegar.
Ser o tener, ¿qué valora más el mercado laboral?
Advice está llevando a cabo un estudio sobre la demanda de soft skills en posiciones de liderazgo, que incorpora consideraciones análogas a los conceptos de “ser” y “tener”. Los resultados preliminares revelan que las habilidades relacionadas con el “ser” tienen una demanda sustancialmente mayor que las habilidades vinculadas al “tener”.
El análisis de 26 210 oportunidades de empleo publicadas entre 2019 y 2023, correspondientes a la demanda de 423 puestos de liderazgo (desde directores hasta supervisores inmediatos de la base operativa) en 131 actividades diferentes, permite distinguir que aproximadamente 9 de cada 10 oportunidades de empleo que definen al menos una habilidad blanda como parte del perfil de competencias que deben acreditar los candidatos, demandan habilidades de tipo “ser” (91,6%). En cambio, menos de 7 de cada 10 demandan habilidades de tipo “tener” (67,8%).
La combinación ganadora
La demanda de un tipo de habilidades no excluye la demanda de las otras; en efecto, el 79 % de las oportunidades de trabajo en posiciones de liderazgo define dos o más habilidades blandas como parte del perfil de competencias que buscan en los candidatos. La clave está, entonces, en analizar cuál es el mix de competencias que demanda el mercado de trabajo.
En 2023, un 59 % de las oportunidades de empleo en posiciones de liderazgo que demandan habilidades blandas, combinan habilidades de tipo “ser” y “tener”.
Las competencias que han tenido el mayor crecimiento en su demanda son de índole social y pertenecen a la categoría “ser”: comunicación efectiva y trabajo en equipo.
Entre las habilidades de tipo “tener”, se destaca la toma de decisiones con base en datos (“data driven”), que responde a un nuevo enfoque de liderazgo centrado en el análisis y la interpretación de datos para fundamentar y respaldar las acciones.
Líderes del futuro
Más allá de la dicotomía entre «ser» y «tener», los empleadores reconocen la necesidad de contar con líderes con un desarrollo equilibrado de tanto competencias personales enraizadas en su identidad como habilidades orientadas a obtener resultados.
La capacidad de comunicación efectiva, el trabajo en equipo y la toma de decisiones basadas en datos emergen como competencias clave. Esto nos permite entrever que los líderes del futuro serán aquellos que integren de manera armoniosa las dimensiones de «ser» y «tener», logrando resultados en un entorno laboral dinámico y desafiante.
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